Overblog
Edit post Seguir este blog Administration + Create my blog

 

(siguiendo con Enric Rillo y dedicado a Genaro Chic García)

El materialismo de la lluvia que, al parecer, rescató Althusser del desván del materialismo filosófico, es algo así como una versión no determinista del materialismo clásico. Parte de la imagen de los átomos de Demócrito, que caen eternamente en paralelo, en una cortina de lluvia en la que el desvío fortuito y casi imperceptible de uno de ellos provoca una primera colisión (clinamen) y, a partir de ahí, las reacciones que deembocan en la creación de un mundo. Un mundo que no es necesario ni inevitable, pero que es (y podía no haber sido). Lo dado parte de un o unos fenómenos imprevisibles y no es la consecuencia mecánica de una serie de leyes inexorables. No hará falta decir entonces que el materialismo de la lluvia se opone al materialismo mecanicista. Me recuerda la teoría de los equilibrios puntuados de Gould, salvando las distancias. La haré mía. Aplicada a la economía, y puesto que el capital preexiste al capitalismo y lo sobrevivirá, dice que el verdadero materialismo (el sustento del hombre) no parte de las formas dialécticas de relación en el trabajo, sino de las relaciones fortuitas entre el capital y su empleo financiero: desde la forma "natural" del primer desvío en el valor de uso apegado al capital ganado o capital tierra, a las formas sucesivas de separación de este encuentro primitivo, en una lluvia imprevisible, entre el capital financiero y la economía estatal. En algún momento del siglo XV en el norte de Italia se inventa el capital-deuda como relación entre la banca y el Estado. Una desviación fortuita, como lo será más tarde, a partir de los "asientos" de Carlos V con su banquero Fugger, la relación (aún dolorosamente presente para nuestros bolsillos) entre la deuda pública y la política tributaria, base del capitalismo moderno y verdadero fundamento de los estados, por encima de la maldita tradición dialéctica alemana. Hacia atrás, aparecen a través de la cortina de lluvia la separación del dinero de las necesidades de la polis a partir del capital comercial y la aparición de los registros de la propiedad en la Roma flavia como precondición de un mercado aún más impersonal que el comercial simple: el del crédito. Serán otras tantas desviaciones originarias de la lluvia material-financiera. Nada de situaciones dialécticamente preñadas de su desarrollo posterior. Lluvia de átomos. Nada de sucesión de modos de producción. Sucesión aproximadamente fortuita de modos de financiación entre lo público y lo privado. Ahí está la clave. Me debato entre profundizar en este camino y publicar retortijones arqueológicamente correctos en revistas indexadas y no me decido

EL MATERIALISMO DE LA LLUVIA O DE LOS MODOS DE PRODUCCIÓN A LOS MODOS DE FINANCIACIÓN
Compartir este post
Repost0
Para estar informado de los últimos artículos, suscríbase: